En primer lugar, resulta fundamental saber la composición de este tipo de productos. Normalmente, suelen estar formados por:
- Cafeína, guaraná, etc. que actúan como estimulantes del Sistema Nervioso Central y en definitiva aceleran el metabolismo
- Carnitina (muy conocida entre los deportistas). Se trata de una molécula que moviliza las grasas hasta la mitocondria
- Colina, la cual interviene metabolismo de las grasas
- Chitosan, que evita la absorción de grasas
En líneas generales esos son los elementos más destacables de cualquier producto de esta categoría, y en resumida todos ellos unidos favorecen la pérdida del peso producida por una dieta hipocalórica. Acompañado de un buen plan de gimnasio, un quemagrasas puede surtir efectos en cortos plazos de tiempo siempre y cuando se use tal y como lo indica el fabricante. Nunca está de más consultar también al médico de cabecera o a un dietista experto para obtener consejos bien fundamentados.
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