Un deportista de alto nivel necesita una dieta algo diferente a la de otras personas. Principalmente, teniendo en cuenta que un deportista suele entrenar bastante físicamente, necesitará una dieta energética, pero también equilibrada.
Generalmente, los hidratos de carbono deben tomarse en buena cantidad, ya que el cuerpo los utilizará para combatir la fatiga y dotar de “combustible” al deportista. Ejemplos de carbohidratos son el pan integral, los cereales o las frutas.
Las proteínas son otro componente que debe figurar en la dieta del deportista, y es que permiten ir ganando músculo para competir mejor y estar en mejores condiciones físicas, aparte de suponer un nutriente esencial. Las encontramos en el pescado, la carne magra o algunos frutos secos.
El otro nutriente imprescindible para el cuerpo son las grasas, que en el caso del deportistas de alto nivel, las emplea como reserva “de última hora” para largas actividades, como corredores de larga distancia. Las más importantes son las grasas no saturadas, que hallamos en el pescado azul y el aceite de oliva.
Una vez repasados estos nutrientes, no debemos dejar de lado la importancia de una correcta hidratación, siempre presente en la dieta de un deportista de élite, y es que al sudar tanto, se deben reponer líquidos de la misma manera. Por eso, el deportista debe beber mucho líquido (especialmente agua) tanto si está realizando actividad como si no.
Como resumen, la dieta de un deportista de alto nivel no necesita de ningún cambio drástico en relación a una dieta normal, pero sí que se debe cuidar de no ingerir tantas grasas, y aumentar las proteínas e hidratos de carbono, en su justa medida.
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