En líneas generales, la dieta South Beach permite una pérdida de entre cuatro y seis kilos de peso en las dos primeras semanas gracias a una alimentación balanceada que esté formada por frutas, vegetales, granos, nueces y grasas saludables; en resumen todo lo necesario para no pasar hambre durante la dieta al mismo tiempo que uno pierde peso casi sin darse cuenta de ello.
Siempre hay que tener muy presente que perder peso no es algo que se consigua de un día a otro ni mucho menos de una semana a otra, pero lo cierto es que gracias a las dietas de este tipo uno puede al menos empezar a preparar su organismo para las sesiones de ejercicio que le esperan en el futuro.
Concretamente esta dieta South Beach está formada por tres fases:
1. - Control de la ansiedad por comer irracionalmente.
2. - Introducción de carbohidratos beneficiosos.
3. - Alimentación correcta de por vida
El último quizás sea el punto más interesante de toda la dieta, ya que de alguna manera es un salto hacia una alimentación saludable que permita mantener la línea durante mucho tiempo sin volver a caer en esos días en los que parece ser que comer es la única solución a todos los problemas.
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