Dieta diabetes

En las sociedades moderas está aumentado la frecuencia de enfermedades crónicas, aquellas que persisten durante toda la vida del individuo. La diabetes mellitus es un problema de salud de aumento constancia en la población general por múltiples causas, pero fundamentalmente por los hábitos y estilos de vida.

La dieta diabetes es fundamental para que la persona que posee el trastorno en su metabolismo energético de los glúcidos puede mejorar su calidad de vida.

Las personas que padecen diabetes deben disminuir el consumo de glúcidos porque contribuyen a que su nivel de azúcar en sangre aumente desproporcionadamente produciendo síntomas.

Una dieta diabetes básica consiste en:

Desayuno: un vaso de leche descremada o un yogurt descremado, acompañado de una rodaja de pan o una porción de cereales sin azúcar agregada.

Media mañana: una rodaja de pan integral con dos cucharadas de queso magro.

Almuerzo: 150 gramos de pescado con una ensalada de verduras frescas, predominantemente de hojas verdes con el agregado de aceite de oliva crudo. El postre consiste en una fruta de estación.

Media tarde: cinco galletas saladas al agua con una rodaja de jamón o atún.

Merienda: un vaso de yogurt descremado o un café o una fruta de mediano tamaño.

Cena: caldo desgrasado, ensalada y un huevo, para terminar con una fruta. Se puede acompañar con una rodaja de pan.

La dieta para diabético es de fundamental importancia que se cumpla para lograr un adecuado control metabólico. Además el diabético debe consumir algún alimento cada 3 horas como forma de evitar los periodos de ayudo prolongados. Para estas ocasiones se recomienda un producto lácteo sin grasas, una porción de cereales o una fruta mediana.

Solamente cumpliendo la dieta del diabético, junto a la toma de medicamentos se podrá conseguir que la enfermedad detenga su progresión en la persona afectada, mejorando la calidad de vida de la persona.