Toda la energía que nuestro cuerpo requiere se obtiene a partir de la metabolización de los nutrientes que aportan los alimentos consumidos diariamente. Este concepto es de gran importancia tenerlo presente para saber que si tenemos sobrepeso u obesidad, la alimentación ocupa un lugar destacado en la misma, tanto por el exceso calórico o el tipo de alimentos que se consumen.
Como primer paso para bajar de peso y luego mantenerse en el mismo se debe realizar una dieta balanceada, debiendo tener en cuenta varias recomendaciones.
En cada ingesta se deben consumir alimentos de todos los grupos de alimentos (glúcidos, lípidos y proteínas) para asegurar un correcto aporte. El tamaño de las porciones debe ser pequeños y combinarse adecuadamente, no existiendo ningún alimento prohibido de consumir.
Algunos alimentos se recomiendan consumir con menor frecuencia, en cambio, otros se deben incluir en los platos de todos los días.
El consumo de frutas, verduras y cereales debe ser incluido varias veces por días, porque contribuyen a generar la sensación de saciedad, aportan vitaminas y minerales indispensables y aumentan la velocidad del proceso digestivo por el aporte de abundante fibra alimenticia.
Otro aspecto olvidado de la dieta balanceada es incluir el color como algo a tener en cuenta, es mejor combinar los alimentos según la mayor variedad de color posible, asegurando de esta forma la diversidad en los nutrientes que aportan.
Es habitual que las personas siempre consuman una cantidad de reducida de alimentos y los repitan a lo largo de toda la semana, esta situación conspira para lograr una dieta balanceada. Para evitar este problema se deben incluir nuevas frutas, verduras y carnes que puedan ser incorporados a partir de pequeños cambios.
La inclusión de nuevas recetas puede ser una ventaja que permita incrementar la variedad de los alimentos consumidos habitualmente potenciando lograr una dieta balanceada.
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